Este cuento habla de dos jóvenes llamados Romeo y Julieta. Los dos se querian mucho y querían casarse, pero no podían. Casi todos los cuentos tienen un final feliz, pero este es diferente, este tiene un final muy triste.

 

 

 

 

 

 

 

 

Las familias de Romeo y Julieta eran muy ricas y poderosas, pero estaban enfadadas entre ellas.

Su enfado era muy grande, tanto que se odiaban. Los Capuleto era la familia de Julieta, y los Montesco la de Romeo.

 

 

 

 

 

 

 

Cada persona de la familia Montesco era un enemigo para la familia Capuleto. El abuelo Montesco odiaba al abuelo Capuleto, y a la abuela Capuleto

le caía mal la Montesco. Teobaldo

Capuleto no hablaba a ninguno

de sus enemigos. Primos, tíos,

sirvientes y amigos de los Montesco

no dirigían la palabra a los Capuleto.

No sabemos porque se odiaban, igual era

porque cada familia quería ser la más rica y poderosa. Entre ellas había una gran competencia.

 

Pero Romeo y Julieta aun que sus familias estaban enfadadas entre ellas, se seguían queriendo mucho.

 

 

 

 

 

 

La historia de Romeo y Julieta empieza en una gran fiesta en la casa de los Capuleto. En esa época, en las mejores fiestas, se decoraba la casa con los mejores y los más lujosos adornos y se recibía a los invitados con un baile.  Julieta tenía muchas ganas de que llegase esa fiesta. Romeo que todavía no conocía a Julieta también quería ir a ese baile.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Pero, los Capuleto no podían saber que era él, ya que éste formaba parte de la familia de los Montesco. Así que Romeo decidió ponerse una máscara para no ser reconocido. Llevar máscaras en aquella época era muy normal, como para nosotros es normal disfrazarnos en Carnaval. Así que Romeo, con la máscara puesta fue a la fiesta.

 

 

 

 

 

 

 

 

Al de un rato, en la fiesta empezó el baile y esa fue la primera vez que Romeo vio a Julieta. Su suave piel y su dulce mirada hizo que el jóven se enamorara casi inmediatamente. El corazón de Julieta latía en los brazos de Romeo.

 

 

 

 

 

 

 

Aun que Julieta sabía que la familia de Romeo eran los Montesco, a los que su familia odiaba, se enamoró de él. Decidieron verse de nuevo, pero de forma secreta para que sus familias no lo supieran.

 

 

 

 

 

 

 

Romeo y Julieta se dieron cuenta de lo mucho que se querían el uno al otro, y decidieron estar juntos para siempre. Fueron a ver a un sacerdote para que les casara en secreto, pero el sacerdote sabía que sus familas se odiaban y dudó sobre su boda.

Tenía miedo de lo que pasaría si sus familias se enterasen de esta unión. Pero el sacerdote creía que, si los dos se casaban, las familias de ellos se perdonarían y se dejarían de odiar.

 

 

 

 

 

 

 

 

Más tarde Teobaldo , el primo de Julieta, se peleó con los amigos de Romeo. Romeo que se acababa de casar con Julieta, quiso separarlos para que dejasen de pelearse pero Romeo sin querer mató a Teobaldo.

Toda la ciudad se enteró de la muerte de este, y Romeo tuvo que escapar y esconderse. El padre de Julieta, vió que su hija estaba muy triste por la muerte de su primo y decidió casarla con un noble.

 

El padre no sabía que ella ya estaba casada con Romeo y que Julieta estaba triste porque Romeo había desaparecido. Julieta muy triste fue a ver al sacerdote para que la ayudase. El sacerdote pensó un plan para salvarla y que no se tuviese que casar con el noble.

El plan era que Julieta tenía 

que beber un veneno

que la dormiría

y la gente pensaría que

estaba muerta, aunque no lo

estaba. Mientras el sacerdote

le explicaría a los padres de Julieta que, esta se

había casado con Romeo porque se amaban.

 

Romeo salió de su escondite a ver a Julieta, pero la encontró sin vida o eso es lo que él creía.

 

 

 

 

 

 

Romeo estaba tan triste por la muerte de Julieta que tomó un veneno pero, esta vez, era un veneno mortal. Cuando Julieta se despertó vio a Romeo muerto, tumbado a su lado. Llorando le besó y se quitó la vida.

 

 

 

 

 

 

 

 

Este es el triste final de Romeo y Julieta. El final de una época de enfados entre los Capuleto y los Montesco. Pero aquí no acaba la historia:

 

Cuando las familias supieron lo que había pasado y se dieron cuenta de que por culpa de su odio habían perdido a sus hijos, hicieron las paces y olvidaron las peleas entre ellos.

No se sabe si esta historia sucedió de verdad, aunque sí sabemos que todo pasó en una ciudad llamada Verona, en Italia. Allí está el balcón donde Julieta se sentaba a esperar a Romeo.

Debajo de este balcón , hay un árbol que visitan las parejas de todo el mundo. Allí cuelgan una nota a Julieta y escriben sus nombres en las ramas del árbol.

Así es como Julieta llegó a ser inmortal, es decir, a ser recordada siempre.